Que orgullo que un escritor peruano haya ganado el Premio Nobel de Literatura 2010, pero sobre todo, qué orgullo que su indiscutible talento haya sido reconocido mundialmente.
La Academia Sueca señaló que otorgó el permio a Mario Vargas Llosa, "por su cartografía de las estructuras de poder y sus imágenes mordaces de la resistencia, la rebelión y la derrota del individuo”.
Habiendo leído únicamente “La Ciudad y los Perros”, me siento ligeramente imprudente al opinar acerca de esta cita, sin embargo, no puedo dejar de mencionar que es el claro reflejo de la obra que tuve el placer de leer. Él microcosmos generado como reflejo de nuestra sociedad en el Colegio Militar Leoncio Prado, es deslumbrante, ya que es el vivo reflejo de la división de clases, la autoridad injusta y manipuladora, la lucha por el poder, y finalmente la dificultad del individuo para surgir en una sociedad opresiva.
Me alegra comprender al menos en una mínima porción el porqué de este reconocimiento y tener la certeza de que es completamente merecido. Felicitaciones Mario Vargas Llosa.
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